Análisis especial para EL OCCIDENTAL
Los resultados entregados por el presidente sobre una gestión exitosa, “lamentablemente solo están en su mente” mientras el país cada día está más descompuesto y perdido en la inseguridad.
Dos años después de haber tomado posesión el actual “gobierno del cambio”, no hay en el país una sola encuesta de opinión donde no se califique mal a un equipo gobernante inepto y sin rumbo; las últimas encuestas publicadas y analizadas, tanto la empresarial como la más grande realizada en Colombia, rajan desde el presidente hasta cada uno de sus ministros. Congresistas y dirigentes políticos que ayudaron a elegir al presidente como Katherine Miranda y muchos otros, califican estos dos años del gobierno Petro como “decepcionantes”.
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*Antecedentes
Colombia aún recuerda el mal llamado estallido social, que para nadie es desconocido fueron los actos criminales de la famosa primera línea, motivados política e “ideológicamente” por el entonces candidato Petro y muchos de quienes hoy lo acompañan en su cuestionado gobierno. Actos vandálicos en las calles y amenazas a las instituciones eran el pan nuestro de cada día durante el gobierno de Iván Duque en su cuatrienio de 2018 a 2022.
Toda acción del gobierno en aquel momento estaba sujeta a responderse con marchas incendiarias, protegidas o encubiertas por mantos de supuestas protestas pacíficas constitucionales como el derecho a la protesta, que siempre terminaban en destrucción, inclusive cuando se incrementaba 50 pesos en los combustibles o se anunció una inconveniente reforma tributaria (que Petro llevó a cabo y ya anuncia más), los gritos de la oposición de aquel entonces eran tan altos, como son sus silencios hoy gobernando, ante los bárbaros actos inolcutables de casi todo su gabinete, especialmente cuando de corrupción o mal gobierno se trata.
*Ministros y Gabinete Rajados
No hay un solo ministro que soporte una buena evaluación, el actual de salud resultó peor remedio que la enfermedad anterior llamada corcho. El de defensa es inocuo a todos los actos delincuenciales aumentados por toda la geografía nacional. El de Hacienda anda enredado con lo del escándalo de la Unidad nacional de gestión del riesgo y con los aumentos de precios a los combustibles. En agricultura no pasa nada. En transporte y vías se nota la incapacidad. En cultura no hay cultura, en educación mucho menos de eso. El de Deportes está mangas por hombros. El saliente bla bla del interior le dió paso a uno peor. Minas sin rumbo y Medio ambiente parece sin brújula. El de relaciones exteriores mal en lo que le corresponde hacer. En Mintic anuncios sin mayor impacto y Vivienda no despega. Y si por estos ministerios llueve por las oficinas de Planeación y Ecopetrol y por muchos otros, no escampa.
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* Corrupción y escándalos para todos los gustos
La Unidad nacional de gestión del riesgo de desastres, UNGRD, encabeza con medalla de oro, como el acto de corrupción campeón de esta competencia por demostrar donde está el ganador del mayor botín. Lo mismo al parecer pasa por la Unidad nacional de tierras; el derroche de la primera dama, en la vicepresidencia e inoperancia en el ministerio de la igualdad no paran, los gastos en las sedes diplomáticas son aterradores, la contratación millonaria de youtuber están a la orden del día; el remedo de la yidis politica y la reencarnación de los elefantes al mejor estilo de Ernesto Samper son el escenario variopinto más notorio del gobierno del pacto histórico, para solo mencionar unos pocos.
*Economía
Solo basta mencionar la persecución a los Empresarios y a los gremios, la incapacidad en el manejo de los servicios públicos, el desdén por el sector Transporte y los transportadores, el desprecio por los inversionistas y la incapacidad de ejecución presupuestal para decir que perdimos completamente la confianza inversionista, sumado a esto una inseguridad real por todo el país y una inseguridad jurídica que están llevando a espantar los capitales que pueden dinamizar la economía en el país. Atacar y acabar los hidrocarburos y la minería, base de nuestra economía, es tal vez el mayor desacierto de este fatal gobierno, donde lo único que nos está salvando es el turismo y un ingreso de divisas, no precisamente atribuibles al actual gobierno del cambio.
*Salud
Según una muy completa encuesta recientemente publicada (Guarumo-ecoanalitica de agosto de 2024), la salud resultó ser la mayor preocupación de los colombianos. La andanada contra un sistema que respondía a las necesidades básicas de los usuarios, hoy hace que los pacientes, incluidos los maestros, estén en el peor momento de la historia reciente de Colombia en esta materia. Las EPS tienen que ser vigiladas e inclusive intervenidas, pero no sacrificadas todas las buenas, por sancionar y llevar a la hoguera de la inquisición a las malas, que también las hay.
*Seguridad
Diálogos equivocados y una paz total que resultó una paz fatal, no requiere de mayor análisis ni información. Volvimos a los escenarios que padeció el país hace 25 años, ya muy superados en el primer decenio de este siglo y que son el pan nuestro de cada día. Un ministerio de defensa que no opera, no actúa y no resuelve, al lado de uno de justicia que juntos buscan beneficios para los delincuentes, son una preocupación ciudadana permanente.
* La democracia amenazada
Es evidente que el gobierno del cambio llegó a implementar su ideología y sus actuaciones, así lo demuestran una diplomacia equivocada, que defiende dictaduras y ataca a gobiernos donde impera el orden; protegen al actual dictador de Venezuela; proponen una Constituyente inoportuna e inviable y hablan permanentemente de
reelección; compra congresistas y amenazan e insultan permanentemente a quienes piensan distinto, es definitivamente un gobierno que tiene como política de estado, acabar con la democracia e implementar su propio régimen.
En conclusión, nos quedan dos años de completa incertidumbre en todos los sectores del país, con un gobernante, según todas las encuestas, con la favorabilidad más baja históricamente, a la mitad de su mandato.