Por: Balmore González Mira
Ahora más que en cualquier momento se ha venido promoviendo desde la gobernación de Antioquia, con todo el entusiasmo, la implementación de agrupaciones de los entes territoriales en diferentes figuras asociativas para lograr un desarrollo conjunto, armónico y necesario en las regiones, pensando en afrontar todos los retos que tiene nuestro departamento de cara a la posición geográfica privilegiada que tenemos ante el mundo, lo cual nos hará más competitivos en el mercado global, si somos capaces de aprovecharlo.
Occidente, como lo hemos predicado permanentemente, está en un lugar estratégico y único, como entrada al mar de Antioquia, dónde tendremos una ventana al mundo como pocas veces se había tenido la oportunidad. La competitividad tiene que construirse desde todas las vertientes que componen el universo regional y para ello es menester pensar como tal, unidos el sector público y privado en proyectos asociativos que permitan crecer paralelamente con los retos que nos imponen las nuevas mega obras que transformarán inevitablemente nuestra historia, Túnel del Toyo, las vías 4G y Puerto Antioquia. Vendrán más puertos.
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Las dos Provincias que se han creado en el occidente antioqueño tienen la responsabilidad de construir la agenda que marque el presente y el futuro inmediato de las comunidades que la conforman. Serán sus decisiones las que tracen el derrotero de las actuales y próximas generaciones. El desarrollo de nuestra región depende de como lo estemos pensando y como lo estemos proyectando para no ser inferiores a lo que nos está imponiendo la nueva dinámica territorial.
Para pensar en conjunto desde las Alianzas Público Privadas que puedan rayar el mapa de oportunidades con inversiones pertinentes, hay que navegar hacia soluciones y propuestas colectivas y no individuales en cada municipio, es hora de pensar como región eslabón entre el país, con el conector del Túnel del Toyo, las vías y la ruta hacia el mundo a través de la plataforma Puerto Antioquia, que será la punta de lanza hacia el nuevo relacionamiento comercial global. Ser competitivos implica tener nuestra propia universidad en cada Provincia, un hospital en cada una de ellas, dar soluciones logísticas en cada territorio; por ejemplo construir o compartir una solución a los residuos en cada subregion; pensar rápidamente en optimizar los frigoríficos, los centros de acopio de alimentos y otras estructuras modernas compartidas que logren satisfacer los mercados locales con sus excedentes, para que en el modelo de exportación puedan crecer económicamente y recibir pagos en moneda extranjera que les permita estar vigentes y competitivos en la agroindustria que generen. Tecnificación de toda la producción agropecuaria es necesaria e inmediata, con vías de acceso para acercar los productos al puerto. Es hora urgente de pensar como región, de aprovechar las potencialidades que tenemos y que ojalá podamos enriquecer cada espacio productivo con los aportes de todos, donde el Occidente sea el nuevo referente mundial del trabajo asociativo. Que se nos identifique como una provincia productiva, autónoma y capaz de generar sus propios recursos.
Pero occidente no es una isla, es un eslabón que une al Suroeste con Urabá y a Urabá con el resto del departamento y con una porción grande de Colombia. Ser eslabón hoy lo convierte en el jugador del mercado mejor posicionado. Occidente es hoy el actor fundamental y de todos depende que veamos pasar el desarrollo por nuestro territorio o que seamos el desarrollo de nuestra región y del país.
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